Nacional cayó derrotado en su propia casa, Millonarios lo venció dos goles a uno y se alzó con la Superliga del fútbol colombiano, disputada entre los dos últimos campeones del rentado.
Un partido arduamente disputado, con un Nacional que se adelantó en el marcador, golazo de Rentería ,un Millos que no se escondió y logró empatar con Ovelar, justo después de que Nacional desaprovechara varias oportunidades de aumentar el marcador.
Un primer tiempo con buen fútbol, donde el equipo verde sometió a su rival, pero al no concretar las opciones, le dio vida, a un Millonarios que tiene un equipo consolidado, con tiempo de trabajo y mucho oficio, el empate del primer tiempo pudo no ser justo con el verde, pero el fútbol casi nunca es de merecimiento.
La segunda parte queda marcada por un error defensivo, Carlitos Cuesta se equivoca en la salida y Ovelar aprovecha para marcar el segundo, duro golpe a las aspiraciones verdolagas de alcanzar el título, a partir de ahí cundió el desespero, se hizo evidente la falta de un conductor, de alguien que tomara con cabeza fría las riendas del equipo verde en la cancha, pues en el banco, el técnico parecía más desesperado que cualquiera, sacó a Vladimir, que si bien es cierto no estaba en una buena noche, también hay que decir que era el único que tal vez individualmente hubiese podido cambiar la cara del partido.
Puntos altos para resaltar en el funcionamiento del equipo, mas allá del resultado, la idea del DT Almiron se sigue consolidando y seguramente con el rodar de los partidos se hará mas fuerte.