Por: Andrés ‘Pote’ Ríos
Escribo desde lo más puro y profundo en mi condición de hincha de Atlético Nacional. Escribo con rabia, con ganas de desahogo, de gritar, de tertuliar con muchos otros que deben sentir lo mismo.
Escribo con el sentir de un año duro, fuerte, de pruebas finas para nuestra institución. Escribo con el grito de campeón de Copa Águila que nos dio el club en medio de sus momentos duros. Escribo para los que dieron palo, para lo que se sostienen en la duda, la lloradera, la queja y no en la fe. Escribo para el pseudo hincha, el muy hincha, el que siempre está ahí, no importa desde dónde esté. Le escribo al club, a don Antonio José, a sus directivas, a la señora del aseo, a la de la recepción, a los de contabilidad, a los profes de las escuelas, a los jugadores, le escribo a todos ustedes y les digo: ¡No les fallaremos, ahí estaremos con el abono en la mano y la camiseta nueva en el pecho! ¡Nadie, usted, vos, yo, él: no abandonaremos! #YoNoTeFalloNacional
No importan las demandas, no importan las finales que se perdieron en casa, no importa lo de Tucumán en Libertadores, no importan ciertos novelones de tipos que ya no están, no importa la sensación de desconcierto e incertidumbre. No importa la pregunta que le hacemos al amigo, al parcero, al que sea que esté a nuestro lado y que es verdolaga: “¿Qué va a pasar con el equipo?”
Eso ya se vivió, eso se vive y nutre. Como lo he dicho muchas veces acá y en las emisiones de La Tertulia Verdolaga: “En los títulos, en los momentos de gloria, muchos están, miles. En el camino de espinas, en el que causa dolor en el pecho, en el de la derrota y las dificultades, pocos. Porque ese es el camino de los que al final ganan, salen fortalecidos y son más grandes”. Ahí, amigos, es donde estamos en este momento, y es ahora y en los tiempos que vienen, cuando más hay que estar.
Porque recuerden que nuestra historia se ha escrito a punta de momentos duros. Lo que vivió “Turrón” Álvarez, luego esa dura década llena de sequía en los sesenta, el ayuno entre el 81 y el 89, los momentos a costa de “Chechés” y otros personajes, el perder dos finales de Copa Suramericana, una Libertadores en el 95. En fin, muchas espinas hemos tenido que soportar para cimentar nuestra grandeza.
Y ahora no es la excepción. Al frente de club (lo digo porque los conozco y han estado en La Tertulia) vemos directivos con profesionalismo, pasión y llenos de compromiso. Ahí, con errores y virtudes, como ocurre en todo en la vida, estamos en buenas manos. Hay que apoyar y creer.
Desde La Tertulia Verdolaga, desde Nacional es Pasión, desde el ADN Verdolaga, desde el corazón, desde la gratitud y humildad hacia esta institución, desde estas letras, los invito a no fallar, a #SerMas, a abonarse, a ir de forma masiva a apoyar al equipo sin importan los nombres de turno porque importan son los colores. #YoNoTeFalloNacional ¡No te fallaremos amado club!
PD: esta columna sale a vacaciones. Nos vemos en el 2019 con más pasión verdolaga ¡Feliz navidad, feliz año!