De los tres partidos del grupo, sobre el papel el más complicado era frente a Japón. Era el rival a vencer pues el fútbol rápido de los nipones los había clasificado como una de las selecciones importantes o revelación. Afortunadamente llegamos a este partido clasificados y sin depender de ningún resultado para pasar. Las dos victorias anteriores y los demás resultados del grupo nos dieron la clasificación a las instancias importantes del torneo de forma anticipada y la pregunta que surge ahora es: ¿rotar o no rotar?
23 jugadores fueron escogidos por Pékerman para representar el país y faltan algunos por actuar. Obviamente va a ser difícil que todos lo hagan, pero por qué no aprovechar este partido para darle más minutos a los Balanta, Mejía, Ramos, Valdes, Jackson, etc. O, por qué no, darle la oportunidad a Faryd de ser el jugador más veterano en jugar un mundial de fútbol. Estoy seguro que la nómina “alterna” de la selección es igualmente buena que la principal y que hay jugadores que están en toda la capacidad de vencer a los Japoneses que juegan con la necesidad de clasificar.
Asegurar los nueve puntos del grupo sería un golpe importante de autoridad que inmediatamente nos daría “estatus” en la siguiente ronda. Es por eso que nuestros guerreros deben salir a dejarlo todo en la cancha: titulares ratificando el por qué están en el 11 inicial y suplentes poniendo a pensar al cuerpo técnico. Así, con toda seguridad, garantizarán que las millones de almas colombianas que alientan desde cualquier parte del mundo van a mantener viva la ilusión de seguir paso a paso rumbo a un objetivo que, por lo que se ha visto, no necesariamente se tiene que considerar tan lejano.
¡VAMOS COLOMBIA!
@GaboSNM.