Nacional pasó de las dudas del primer tiempo, a la valentía y celebración de los últimos 30 minutos. Está ahora, en cuartos de final de la Copa Sudamericana, en los que enfrentará a César Vallejo de Perú. Ganó con un golde Bocanegra,m.70, originado en un tiro de esquina, pero también pudo quedar eliminado cuando una anotación legítima de Diney, a 6 minutos del final , fue mal anulada por el árbitro. San Judas Tadeo, el santo de los imposibles, estuvo de ésta parte del continente.
PRIMER TIEMPO. Vitoria comenzó alegre y con ataques de oleadas, pasando el balón a lo largo y a lo ancho, pero no tuvo profundidad y estuvo lejano de aquel equipo de suplentes, que despertó admiración en el Atanasio Girardot, en el juego de ida. En el Barradao de Salvador (Bahía) y con titulares, quiso imponer condiciones, pero se hizo plano, repetitivo y escaso de ideas. Poco a poco los locales se fueron resignando al 0-0, que los clasificaba y solo registraron un remate al arco, en el m.42. Nacional por su parte salió desde el fondo y desde el medio, con balones largos y divididos. De allí su falta de aproximaciones al arquero Fernández. Un solitario intento de Guisao en el m.46, fue rechazado por Cadú. Los brasileños se derritieron en las cercanías del área y los colombianos carecieron de tejidos con la pelota. Los arqueros se ganaron el pan sin trabajar, en un segmento para el bostezo.
SEGUNDO TIEMPO. Dos cambios, transformaron a Nacional. El ingreso de Mejía, m.10, le dio más personalidad al medio campo. La entrada de Edwin Cardona, m.15, casi siempre garantiza algo distinto en la generación y finalización del juego. El equipo cambió de actitud y desde entonces peleó cada milímetro del gramado. En las transiciones al ataque, Bocanegra, Sherman y Farid, se hicieron compañía. Sherman prolongó su esfuerzo solitario del primer tiempo y Edwin, comenzó a sacar conejos del sombrero ( dos jugadas suyas al final, por poco terminan en gol). Al superarse Nacional en intensidad y juego, fue estirando líneas hacia y arriba y hacia los flancos. Cobró varios tiros libres…y en uno de ellos desde la esquina, Sherman hizo el lanzamiento…Henríquez anticipó al arquero, la pelota rebotó en el travesaño Y DANIEL BOCANEGRA, cantó bingo. 1-0. A partir de entonces se multiplicó en marca y recuperación del balón. Vitoria corrió, pero se vió ofuscado, por su lucha contra el cronómetro. Y cuando más apretaron los brasileños, Osorio ordenó línea de 5 defensas y luego 3 recuperadores, un hombre libre (Edwin) y otro fresco en punta, para los contragolpes. Vitoria lanzó sus cargas de profundidad demasiado tarde y Nacional ya estaba vestido con el traje de héroe.
Con más corazón que fútbol, el verde ‘’descubrió’’ el secreto de la cumbre.
Escrito Por : Wbeimar Muñoz Ceballos.
