Camilo Vargas fue el héroe de la tarde dominical en la capital de la república, sus atajadas dejaron a Nacional con su arco en cero y un punto más en la tabla de posiciones.
Resistido a su llegada, mas por el misterio que rodeó el hecho de llegar casi un mes después al equipo, que por su calidad como jugador, Vargas se ha ido ganando poco a poco el aprecio de la hinchada verde y ayer con su actuación corroboró sus grandes cualidades como arquero, que lo han llevado a ser el segundo arquero de la selección Colombia.
En Bogotá, una plaza supe conocida por el arquero verdolaga, volvió a salir como figura, algo a lo que estuvo acostumbrado durante mucho tiempo, mientras tapaba en el equipo rojo de la capital, ayer con la camisa verde, ahogó el grito de gol de los delanteros Embajadores.
Hoy Nacional no tiene problemas en el arco, Franco Armani y Camilo Vargas, los dos arqueros que normalmente se turnan la portería del conjunto verde, responden con creces a la confianza depositada por el técnico Juan Carlos Osorio.