A la mayor riqueza técnica de Nacional, Las Águilas opusieron la táctica, basadas en una alineación 4-1-4-1 que tenía un doble objetivo : cerrar de una parte el juego interior del enemigo y taponarle las bandas.
Durante 30’ ejercieron el control con varias acciones puntuales : Chará le tiró el lazo a Macnelly ; entre Córdoba y Géiler controlaron a Sebastián y por las orillas evitaron la profundidad de Copete y Berrío. Hasta que una malhadada acción del defensa Javier López acosado por Ibarbo a centro de Alcatraz, culminó en el arco de Torresagasti, quien hasta ese momento era ángel guardián y mantenía a flote la nave visitante, con atajadas espectaculares. El autogol de López rompió el celofán , después de que Nacional estuvo amarrado porque no tenía espacio para maniobrar… ni le daban tiempo para pensar….o simplemente se interponía el cancerbero del frente.
Las Águilas se aferraron a un plan de destrucción en defensa llenando el terreno de minas, pero al recuperar el balón no lo sostuvieron bien. Además en el contraataque que planificaron, erraron la llegada al arco de Armani : en vez de hacer la contra por las orillas de la cancha, insistieron en ir por el medio con un juego vertical muy impreciso. Por eso en el balance de los 45’ iniciales Nacional tuvo aparte del gol, 4 remates ( 3 de Macnelly y 1 de Sebastián) y los hombres de Otero 2 ( disparo de Córdoba de media distancia que se desvió y un cabezazo peligroso de Mosquera después de un cobro desde el banderín).
Casi siempre un gol en contra, es un contratiempo que daña la estrategia. Los de Rionegro recurrieron en la segunda parte a los ingresos de Jonathan Álvarez , Luis Páez y Fabián Viáfara y el relevo de Chará, Hilton y Sinisterra. Por ganar en manejo, perdieron marca y permitieron 3 avances muy explosivos de Nacional entre los minutos 1 y 15 : Ibarbo botó una oportunidad a pase de Macnelli ( el 10 a diferencia de otras jornadas, fue muy ambicioso y quemante en el área rival)… a Berrío le dio una respuesta inmensa el arquero rival… y en otra ocasión ( es nuestra apreciación) en pase de Macnelly a Ibarbo hubo una pena máxima no sancionada.
Hasta allí llegó Nacional puesto que bajó el ritmo de juego en los 30’ finales y sobre las últimas escaramuzas tuvo grandes sustos en el arco de Armani con dos apariciones muy punzantes: una de Jonathan y otra de Páez, quienes estuvieron muy cerca de decretar el empate.
Águilas Rionegro, apostaron todo su capital a la defensa…pero se quedaron sin argumentos del medio hacia arriba. En éste último aspecto fueron blandos y no mostraron recursos para transitar en la zona de aprovechamiento ofensivo. Nacional con algunos chispazos de sociedades y triangulaciones, pudo irse del Atanasio con una sonrisa más amplia, pero bajó las revoluciones y se conformó con el error visitante transformado en victoria.
Los verdolagas tenían acostumbrados a sus hinchas ( fueron al Atanasio 29798) a marcadores más altos y ese detalle fue el que ellos se quedaron esperando. De todas maneras 9 puntos de 9, es una cifra que aumenta la autoestima a pocos días de su participación en Copa Libertadores de América.
No les parece ???
Escrito Por: Wbeimar Muñoz Ceballos.