El cero parece número de moda puesto que los clásicos argentinos del domingo pasado terminaron sin goles y ‘’el globito’’ y los verdolagas ajustaron dos juegos en idénticas condiciones, como si el gol le huyera al otoño reinante en la tierra de Gardel.
Partido de pocas revoluciones el jugado en el estadio Ducó de Parque Patricios. Dos equipos que atacaron sin mirar. Huracán con sus delanteros enganchándose antes de tiempo para acabar casi siempre en fuera de lugar y sin talento en la zona de generación de fútbol.
Nacional en una mala noche de la dupla Guerra-Sebastián ; el resto de compañeros sin atacar suficientemente los espacios y como resultado de lo anterior, con posesiones muy cortas del balón ; otra vez preocupante la falta de movilidad en los 90’ ; el juego en corto estuvo anticipado por el rival y el que hizo en largo resultó muy previsible, sobre todo a la hora de habilitar a Berrío y Copete ; poca salida de Bocanegra y Farid y solo dos o tres llegadas al arco de Díaz, lo que es una mala cifra para un ataque que aspira a ganar la Copa Libertadores.
De los locales, muy poco para aplaudir. Solo fueron filosos al final del compromiso cuando Franco Armani, con reflejos de felino, atajó un doble remate de Mancinelli. Los visitantes se aproximaron en tres mano a mano, dos de Berrío y uno de Ibarbo…y pare de contar.
Los volantes de uno y otro lado, no se asomaron a las áreas enemigas. Los extremos escasos de soltura en las bandas, no fueron profundos. Los rematadores de media distancia enviaron casi siempre la pelota al país de las tinieblas. Escasearon los toques en velocidad y las permanentes desmarcaciones, para lograr un fútbol posicional.
Noche triste por la falta de goles y finura en los pases, amén de una producción en descenso.
Huracán sin ideas y Nacional sin juego.
Recemos para que no nos repitan la dosis.
No les parece ???
Escrito Por:Wbeimar Muñoz Ceballos.