FOTOS: CORTESÍA DIMAYOR.
Por : Juan Felipe Velásquez.
Atlético nacional cae en condición de visitante por la mínima diferencia ante Rionegro Águilas y, aunque en este caso el resultado sea anecdótico por la condición de clasificado, la lupa se debe poner en los rendimientos individuales y colectivos.
El verde probó variantes tácticas con miras al inicio los cuadrangulares finales. El equipo, en su totalidad, presentó una nómina alternativa, suplente, que deja varios indicadores preocupantes para el cuerpo técnico, entre ellos, la falta de recambio del equipo verde de Antioquía a causa de los pobres niveles individuales. Varios jugadores debieron mostrar ayer que estaban para pelear el puesto en la titular de Nacional, pero fue todo lo contrario; durante el partido no hubo un solo jugador a resaltar y, ya sea por las lesiones o por simple bajo nivel futbolístico, está claro que Nacional tiene 11 o 12 titulares y que, por ahora, no pude contar con más.
No hubo fútbol ni hubo rebeldía, el equipo fue inofensivo, permeable, lento, predecible y aburrido. No se entiende cómo es que algunos jugadores se someten ellos mismos a una suplencia prolongada. Y es que Nacional necesita 15 o 16 jugadores en correcta forma para afrontar la fase final del campeonato y, por fin, alcanzar el título de Liga, pero con lo mostrado ayer, se puede concluir que el fondo futbolístico de la plantilla es corto y que la hinchada tiene razones para preocuparse. Eso sí, cabe aclarar que la responsabilidad del mal resultado de ayer no es enteramente de los futbolistas, pues en un equipo la responsabilidades siempre son compartidas.
Sería necio afirmar que la plantilla de Atlético Nacional es corta, pues evidentemente tiene una de las mejores de todo el campeonato colombiano,
Pero eso sólo puede afirmarse en lo teórico pues en lo práctico se ha mostrado otra tendencia.
Justificada la preocupación del hincha, pero al final, preocupación efímera y pasajera, pues tiempo de trabajo aún queda y espacio para la mejora hay mucho y esas son buenas noticias para Nacional. Dependerá ahora del cuerpo técnico el levantar el espíritu y el fútbol de los llamados suplentes de esta nómina para poder permitir que Nacional tenga diferentes armas y recursos para alcanzar los objetivos propuestos este semestre.
De nada vale tocar nombres puntuales, pues el rendimiento en general fue decididamente malo, pero la calidad individual del equipo que se mostró ayer es conocida por todos y sabemos que, más que depender de una suplencia inexperta o incapaz, dependemos es del cuerpo técnico para que levante el espíritu de toda esta plantilla y logre sacar ese 100% de rendimiento y talento que ya conocemos de todos los jugadores de Atlético Nacional.