Por: : Juan Felipe Velásquez.
Este capítulo del libro ya lo hemos vivido. Ver a Nacional en determinado partido siendo arrollador, competitivo, eficiente y dinámico para que, tan solo tres días después, ver todo lo contrario.
Esto no es nuevo para nadie. Ya nos ha tocado pasar por esto. Nacional fue uno ante Once Caldas y fue todo lo contrario ante Águilas Doradas. ¿Qué factores influyen para que el rendimiento de un equipo cambie tanto en tan poco tiempo?
Pues bien, a mi manera de ver, no se puede atribuir a un solo factor. De hecho, el contexto ayuda mucho para poder sacar conclusiones. Si bien es cierto que cuando un equipo es irregular en su rendimiento se puede culpar a la idea de juego, esta vez creo qué pasa por el inicio de un proceso que involucra los canteranos. Un plantel joven que se está desarrollando a una velocidad adecuada. Hay que ser pacientes, hinchas de Nacional. No podemos estar quemando jugadores a los 18 años solo porque no despunta en sus primeros minutos como profesional cual brasilero. La paciencia es una virtud.
Nacional fue errático y plano, si, pero también hay que reconocer que Águilas es un equipo magníficamente entrenado. Jugamos contra un conjunto de piezas más maduras y mejores preparadas. Una brecha a penas normal en el inicio de cualquier campeonato del mundo.
Dentro de lo puntualmente reprochable: los 3 volantes de marca. Que poco aporte de Palacio, Góez y Solís a la hora de atacar. Ah, y por supuesto, los suplentes. Ninguno marcó diferencia cuando entró al campo.
Ahora lo rescatable: Felipe Aguirre y Tomas Ángel. Se jugaron un partido completísimo en sus respectivas posiciones. Ilusión te generada.
Párrafo final para comentar el tema del momento: Tatay Torres. Quizás el sub 20 de mejores cualidades técnicas del país. Un prospecto de crack, sin ninguna duda. Un jugador promesa que podría convertirse en realidad si se entrenase con profesionalismo en el sentido total de la palabra. Pero ojo, no se confundan; Torres es un magnífico futbolista que está integrándose al mundo profesional del fútbol con adecuado desempeño, pero los cracks deben ser cracks dentro y fuera de la cancha. Nada complicado de corregir y todo un mundo por mejorar. Para tener jugadores que brillen en las mejores ligas del mundo, primero hay que entender que la disciplina y la entrega profesional lo es todo.