24805 parroquianos que pagaron $ 374’.784.000,oo, para ver la victoria de Nacional 2-0 sobre el cuadro ‘’asegurador’’ de La Equidad, se debatieron entre el aplauso por los goles y las llegadas, la incertidumbre en algunos pasajes y la gritería desenfrenada cuando Jefferson Duque cerró la noche.
En el medio, la visita incomodó mucho a Macnelly y Chará y por eso a la dupla creativa de los verdolagas le faltó más continuidad en sus enlaces con Duque y Ruiz.
En el primer tiempo Nacional invadió zona enemiga, con más posesión de la pelota y ataque.
Sachi planteó un partido de control, con por lo menos 9 hombres por detrás de la línea del balón. Por eso, a pesar de la iniciativa local, no se hizo fácil el arribo a zona de remate. Los verdes comenzaron a combinar trazos cortos y luces largas, pero sin oxigenación por las bandas, ni un media punta eficaz por el medio.
El desembarco fue prometedor pero no eficaz, en aproximaciones de Ruiz, Jefferson, Macnelly y Chará ( 2 veces). En la otra área Watson Rentería, le quebró las cinturas a Nájera y Henríquez, pero desvió los disparos.
En muchos pasajes Nacional jugó a uno o dos toques para eludir las marcaciones rivales, pero Equidad militarizó su zona defensiva, reduciendo bien los espacios El local en esos 45’ de comienzo le apostó al emprendimiento y a la ofensiva.
El visitante invirtió casi todo su capital en el sector de seguridad para salir después de contra y mantuvo el cero, porque a los pupilos de Rueda les quedó faltando casi siempre una cucharadita de inspiración, que es un ingrediente básico para el agua medicinal de los goles.
A los 41’ se produjo un tiro de esquina cobrado por Macnelly. Jugó en corto para Chará y éste hizo un cambio de frente al segundo sector del área donde aparecieron ALEXIS HENRÍQUEZ y el 1-0. Fue una jugada de pelota detenida que le dañó las pólizas al oponente.
La ventaja parcial le permitió a Nacional retroceder su bloque en el segundo tiempo y obligó al adelantamiento de líneas de La Equidad, pero con un inconveniente: éstas exageraron el armado de juego y por eso carecieron de sorpresa.
Los aseguradores masticaron mucho la pelota y remataron muy poco, es decir toque sin pegada. El local le dio prelación al objetivo, por encima de la estética y comenzó a acercarse al arquero Bonilla con contragolpes veloces. A los 93’ en un centro de Valencia (quien había reemplazado a Chará) JEFFERSON DUQUE bien desmarcado, aseguró el 2-0, en jugada en que lo habilitaron el arquero Bonilla y el defensa Soto. 2-0.
En el cómputo del ataque fueron más los locales con 10 llegadas de riesgo por 5 de la visita. Y en éste rubro estuvo la clave para una doble conquista: la del resultado y la de los corazones.
¿No les parece?.
Escrito por : Wbeimar Muñoz Ceballos