Decir campinazo es inevitablemente acordarnos de esa última gesta en que el verde después de haber sido destruido por todos los medios rolos, logró arrebatarle a SantaFe el título con un 2×0 contundente ¡Grande Armani, grande Duque y Macnelly!
Sin embargo, lo de hoy tiene un condimento especial y no pasa por el rival que tendremos al frente, sino por la forma en que Nacional salga a la cancha y cómo Almirón pare al equipo. Hoy no hay una cita con la historia, hoy hay una cita con nosotros mismos, con nuestra resiliencia y con una catarsis que seguramente el técnico ya ha hecho desde el jueves pasado.
Hoy salimos a la cancha siendo igual de grandes que siempre, conscientes de que ya es hora de mejorar y que las críticas siempre serán constructivas, jamás destructivas ni con el ánimo de dañar o destruir el proyecto que el club está edificando. Seamos conscientes que este es un proceso más serio, con menos filosofía y más argumentos que el que escuchábamos con “acento raro” hace unos meses. Hoy al Campín sale un equipo que sigue teniendo el respaldo de todos nosotros y que pase lo que pase lo seguirá teniendo el jueves que viene en el Atanasio.
¡Aprieten nalga y contengan el grito que el gol va a llegar!
Escrito por:El de la Silla