Noche de alegría decembrina en un escenario poblado por 44059 espectadores que pagaron $ 1.163’.338.000,oo y manos enrojecidas de tanto aplaudir la llegada de Nacional a las semifinales del campeonato profesional, en las que enfrentará al vencedor de la llave DIM-Alianza que se definirá éste domingo.
Con orden, jerarquía e inteligencia el equipo local superó a los azucareros ( actuales campeones ), hasta derretirlos por mejor juego, solidez en defensa, claridad en el paso del medio campo y 10 llegadas de peligro al arco de Hernández. ‘’De no ser por nuestro arquero, nos pudimos llevar media docena de goles’’, reconoció al final el técnico Fernando ‘’el pecoso’’ Castro.
Cali con el arrojo de los equipos que no saben especular, se puso en ventaja a los 14’ con tanto de ANDRÉS PÉREZ quien aprovechó el rebote de un cabezazo de Roa, para el 1-0. La ansiedad de Nacional, pasó pronto. Se fue asentando en el terreno y moviéndose para abrir espacios, devolviendo la cortesía del gol en contra con una anotación que también partió de pelota detenida.
Tiro de esquina ejecutado en corto entre Macnelli y Marlons, centro cerrado en forma de buscaniguas y la punta del guayo de OSCAR MURILLO, decretó la igualdad 1-1 a lo 23’. Cinco minutos después, un tiro libre desde 25 metros cobrado por ALCATRAZ GARCÍA, pasó la barrera y dejó parpadeando al golero enemigo : 2-1. Al voltear la pizarra Nacional, su enemigo empezó a angustiarse y cambió la técnica de su juego, por la ofuscación y la búsqueda de la pierna oponente.
Les proponemos los siguientes jugadores y entre todos elegimos la figura de este partido. Nal 3 – Cal 1
— Nacional Es Pasión (@NacionalsPasion) diciembre 6, 2015
El empuje de la visita se diluyó poco a poco. Por discutir con el árbitro y reiterarse en las faltas, acabó pegando y cerrando sus posibilidades de ataque a tiros desde lejos, que inquietaron muy poco. Nacional distribuyó bien las funciones en defensa, alternó la salida de Chará y Sebastián desde la zona intermedia y buscó a Marlos por la izquierda para que sacara su repertorio de diablo de potrero.
A punta de circulación del balón y ataques masivos fue mareando al Cali, que no tuvo fórmulas de llegada y debió multiplicarse con sus zagueros para evitar anotaciones cantadas de Marlos, Jéfferson, Sebastián y Chará.
El anfitrión en el segundo acto controló la pelota, los espacios (cerrándolos y abriéndolos, según defendiera o atacara) y acalló al enemigo, con un monólogo extenso y armonioso. Confirmó Nacional, porqué es el mejor equipo del semestre y selló la jornada con un gol, también de tiro de esquina, en el que intervinieron Macnelli, Sebastián y MARLOS MORENO, para el definitivo 3-1.
Los verdolagas siempre fueron juntos en todas las fases del juego : se replegaron en forma coral y recuperaron el balón en acciones cooperativas ; crearon juego a distintas alturas de la cancha y se desplegaron en manada. A todas éstas, Cali solo mostró desespero y apuro. La pelota volvió siempre a los ‘’camisas verdes’’ ( la visita jugó con uniforme negro y terminó guardándole luto a su tristeza).
Nacional combinó robo de balón para poner directa hacia el arco rival y segmentos de posesión para anestesiar a la fiera enemiga. Con los arranques de Chará, Sebastián y Macnelli a distintas alturas de la cancha, rompió el dique de contención que planificó el Cali, constituído por Balanta, Pérez y Rentería ( Cabezas después).
Nacional dominó el juego interno y también el externo y tuvo cabeza fría. Cali con la mente caliente, terminó partido en dos bloques : uno de espera y otro de intención ofensiva, otorgando 25 metros para el arranque limpio del vencedor. Por eso vimos a la gente del Pecoso, con más piernas para correr, que ideas para aprovechar su juventud y su técnica.
Nacional se apoderó de los tres puntos y se hizo dueño de la noche. Por eso terminó con las banderas al viento.
¿No les parece?