CONMEBOL LIBERTADORES 2021.
AGOTADOS DE NACIONAL
Por: Juan Felipe Velásquez.
He sido paciente, he sido cauto, he sido analítico, poco pasional y responsable, pero todo tiene límite. Nacional vuelve y cae derrotado, nada nuevo, ha perdido 3 de sus últimos 6 partidos y no conoce la victoria desde hace un mes. Yo, a título personal, manifesté desde el día 1 de este nuevo proceso que Alexandre Guimarães no era el técnico adecuado para Nacional simplemente porque su estilo de juego no corresponde a la filosofía base del equipo. Nacional, más allá de perder, no remata al arco, no crea opciones, se repite en errores partido tras partido. Si bien, la paciencia y la perseverancia son valores necesarios en cada nuevo proyecto futbolístico, es imposible de aplicarlo cuando el equipo se desarrolla mal en todas sus fases de juego
Al César lo del César, y si he sido crítico con el DT y sus planteamientos, también debo serlo con los otros responsables de esta realidad futbolística: los jugadores de Atlético Nacional parecen estar acostumbrados a perder; parece que no les incomodara como nos incomoda a los hinchas. Me cuesta afirmar que la plantilla de Nacional es mala, porque evidentemente requiere retocarse, pero ¿mala? ¿No será cuestión de actitud? Debe llegar un punto de inflexión y empezar reconocer que les falta amor propio. Que son jugadores de renombre que no están dando la talla y que el destino de la institución también les compete.
A mi me encanta hablar de táctica, de estrategia, de fútbol, pero ¿ cómo hago? ¿Qué se puede rescatar de Nacional en el último mes? Es que me veo impedido para poder exponer una crítica o alabanza futbolística al equipo. Pocas veces me encontré un equipo tan simple, tan desabrido, insustancial. No deja nada positivo para resaltar y lo negativo se repite partido tras partido: excesiva velocidad en sus transiciones, sistema de presión equivocada en zona 1, pocos efectivos en zona 3, excesos de jugadores en zona 2, pocas variantes de ataque en carriles externos, dependencia máxima de la inspiración de Andrés Andrade, en fin. Situaciones anteriormente comentadas y que, para nuestra decepción, siguen sin corregirse.
No me compete a mi la responsabilidad de tomar decisiones con respecto al futuro del equipo. Mi parte ya la he hecho todo el semestre y he apuntado desde el primer partido que Nacional es timorato, que prioriza en exceso la fase defensiva y que juega a NO perder más que a GANAR. Renovar la plantilla, cambiar de técnico, borrón y cuenta nueva, ¿qué sé yo? Que los líderes de la institución, las cabezas encargadas del correcto funcionamiento hagan su tarea y tomen decisiones que favorezcan el renacer del club.