Tristeza, desilusión, decepción, son algunas del cúmulo de sensaciones encontradas que nos dejó Atlético Nacional en la hinchada tras su eliminación, tan tempranera como sorprendente, faltando dos fechas para la final de la Liga Femenina. Y no es para menos, pues la campaña que hicieron las verdolagas en el todos contra todos fue tremenda; líderes invictas durante todo el torneo, ganaron el punto invisible, pero en los cuadrangulares semifinales todo se derrumbó, ¿qué pasó?..
La respuesta al ¿qué pasó? con las verdolagas en las finales solo la tienen las jugadoras y el cuerpo técnico verdolaga, es evidente que hubo un bajón futbolístico en el momento menos apropiado y menos esperado. También hay que recordar los atenuantes que pasaron en esos primeros partidos [como el de Santa Fe en Bogotá] o esos imponderables que llaman en el fútbol para que los resultados no fueran los esperados, pero también es posible que factores extra futbolísticos hayan pasado factura en el momento menos apropiado, cuáles fueron? ni idea. . .
Lo cierto del caso es que hubo bajón de rendimiento colectivo y también individual. En lo individual hubo jugadoras como Yoreli Rincón, Daniela Montoya, Angela Barón, Marcela Restrepo, Yisela Cuesta, Sara Córdoba, entre otras, que no rindieron lo acostumbrado, digamos que sobresalieron en el todos contra todos y en las finales no rindieron igual.
Cuando las derrotas llegan, desafortunadamente siempre se buscan culpables, y aquí hay que decir que un sector de la hinchada estaba señalando como culpables al DT y a las arqueras y cada cual tiene derecho a opinar, ni más faltaba, pero si bien es cierto hubo errores puntuales de las arqueras, no es culpa de ellas, que el DT Jorge Barreneche, se equivocó al rotarlas, tal vez(?), eso es de análisis, pero lo cierto es que hubo un bajón en todo el conjunto verdolaga.
¿ES UN FRACASO?
Aunque no es, creemos, para rasgarnos las vestiduras, pero si es evidente que hay una decepción unánime en la hinchada, ¿fue fracaso? ¡CLARO QUE SÍ!, pero se debe continuar el proceso, eso está claro. Aprender de estas duras derrotas será lo más importante y corregir todo lo que sea posible y necesario.
Nunca antes se había tenido tan ceca y tal vez tan seguro un título, desde mitad de torneo se hablaba de eso y con el paseo del todos contra todos, todos nos ilusionamos apresuradamente y pasó lo que aún no sabemos qué pasó.
Reiteramos nuestro apoyo total al fútbol femenino, al equipo, al cuerpo técnico e invitamos a la reflexión general para que se tomen los correctivos necesarios que más le convengan a la institución.
¡HASTA LA PRÓXIMA, VEDOLAGAS!