Sao Paulo que perdía la serie 0-2, llegó al Atanasio a incomodar a Nacional con una presión adelantada que le impidiera salir jugando en corto desde atrás, lo que lo obligó al balón largo. Y en menos de lo que canta un gallo (8’) estaba ganando 1-0 con gol de cabeza de CALLERI quien saltó más que Farid y aprovechó la duda en la salida de Armani.
En la jugada previa Bastos embolató a Bocanegra para lanzar el centro abierto desde el flanco izquierdo.
La reacción verdolaga fue rápida, puesto que a los 15’un pase de Berrío al callejón, dejó a MIGUEL ÁNGEL BORJA mano a mano con el arquero Denis y el zurdazo cruzado del primero situó el 1-1. Pasaron otros minutos de incertidumbres locales. Primero en el juego aéreo con un cabezazo de Calleri en el travesaño y un mano a mano de Centurión con Armani, que neutralizó el arquero. Hasta allí Nacional era un equipo sin pausa y contagiado del ritmo frenético de Sao Paulo.
La gente de Rueda se fue asentando y comenzó a embestir por la derecha con Berrío en la zona de Mena y con transiciones muy rápidas al ataque en las que participaron también Macnelly y Borja, a tal punto que Marlos falló dos remates en inmejorables condiciones para el gol. El anfitrión pasó rápido la primera línea de presión adversaria y contestó al juego agresivo de los paulistas con orden e intensidad.
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Conclusión del primer tiempo : Sao Paulo asustó con buena dosis de correos aéreos, pero después Nacional se recogió mejor en su bloque de seguridad y en la contra estuvo más veloz que el caballo del comisario. Empate 1-1.
Como era de esperarse Sao Paulo jugó con defensa adelantada comenzando el segundo período, pero resulta que por protegerse, sacó a Hudson quien tenía tarjeta amarilla y propuso una ofensiva hasta de cuatro delanteros. No le pudo ir peor, puesto que retrocedió quince metros a Wasley (un buen enganche) y perdió en contención atrás y en salida de juego desde el medio hacia arriba. Producto de lo anterior el visitante se partió en dos bloques : uno de espera y otro de búsqueda, pero muy separados el uno de otro.
Allí comenzó la debacle del perdedor. Nacional desde entonces pasó muy fácil la alambrada del medio y comenzó a llegar una y otra vez al área enemiga. Tuvo ocho posibilidades de aumentar la cuenta y con el ingreso de Guerra le dio mejores destinos a la pelota. Franco Armani no volvió a trabajar y bien pudo haberse dedicado a tejer y silbar, porque en su arco no se volvieron a escuchar disparos.
Es más : el verde empezó a jugar con 3 defensas (Aguilar, Henríquez y Davinson), dejando a Berrío y Farid como carrileros de ida y vuelta y se apropió de la pelota, los espacios y la posibilidad de otro gol, que llegó por la vía del penal (otra vez MIGUEL ÁNGEL BORJA, con un lanzamiento estremecedor e inatajable en el minuto 67) para el 2-1 definitivo y la clasificación a la final de la Copa Libertadores de América.
Sao Paulo protestó la pena máxima y el árbitro chileno Patricio Políc, expulsó a Lugano y Wasley, por lo que los visitantes terminaron la jornada con 9 jugadores. Podríamos decir que los 45’finales fueron un monólogo del vencedor, que lleva una campaña brillante : 12 juegos, 10 victorias, un empate, una derrota, 23 goles a favor y solo cuatro en contra. De allí el generoso aplauso que le dieron al final los 44225 parroquianos que pagaron la suma de $ 2857 millones de pesos.
Una noche feliz, como para desatar la fiesta. El ‘’rey de copas’’ está a solo 180 minutos de la gloria.
No les parece ???
Escrito por: Wbeimar Muñoz Ceballos.